Acertijo- El auto destrozado

Un hombre era el orgulloso poseedor de un bello y costoso Mercedes deportivo.
Un día lo condujo a un estacionamiento aislado y le destrozó el parabrisas, raspó todas las puertas y arrancó la radio.
¿Por qué?

RESPUESTA

Acertijo- El banquero

Bernard era el presidente de un banco de Wall Street.

Una mañana, mientras subía a un tren atestado, se sintió muy preocupado.

Cuando el tren se detuvo él descendió se sentía muy descompuesto, pero no estaba preocupado.

¿Por qué?

RESPUESTA

Acertijo- La llamada telefónica

Ayer llamaron por teléfono:
– Dígame.
– Por favor, ¿podría hablar con Don Fernando Fernández?
– En estos momentos no está en casa, ¿de parte de quién?
– Soy Santiago Schwartz un compañero de trabajo, podría decirle que tengo que
hablar con él, creo que tiene mi número de teléfono.
– Por supuesto, pero ¿sería tan amable de deletrearme su apellido?
– Sí, ¡cómo no!, Schwartz, S de Sevilla, Ch de chaleco, W de Wamba, A de Almería,…
– Perdón, ¿W de qué?
– W de Wamba, A de Almería, R de Roma, T de Toledo y Z de Zaragoza.
– Lo he anotado, le pasaré el recado.
– Gracias, ha sido usted muy amable.
– Gracias a usted, buenas tardes.

¿Que incoherencia encuentras?

RESPUESTA

Acertijo- Una historia de amor

Siempre que podían escapaban hacia la montaña que dominaba su ciudad,
para pasar la noche bajo las estrellas, en una pequeña tienda de campaña.
Se susurraban palabras de amor cerca del fuego, hablaban, reían, se
sentían felices. Asaban carne y patatas y bebían vino en copas de cristal
de Bohemia. Después de cenar jugaban al ajedrez y compartían algún libro.
Cuando anochecía, ella apagaba la única luz que les alumbraba paracontemplar cómo el cielo se sembraba de brillantes estrellas; él,
lector empedernido, seguía leyendo un rato antes de buscarla entre las mantas.

RESPUESTA

Acertijo- Un billete en el Quijote!

Anoche antes de acostarme estuve leyendo el libro de Marius Serra Verbalia.com,
jugar, leer, tal vez escribir. Tuve la suerte y el honor de que me lo dedicara el
domingo pasado en la Feria del libro de Madrid. Escribió: «Para Francisco el rey!
Verbal de El huevo de chocolate con afecto y complicidad». Después hojeé, una vez más, «El Quijote», libro imprescindible, donde encontré aquello de:«si da el cántaro en la piedra o la piedra en el cántaro, mal para el cántaro». Ya cansado utilicé un billete de 20 euros como marcador de página para señalar entre las páginas 421 y 422 del Quijote. No recuerdo más,… debí quedarme dormido.
¿Cuál es la falla del relato?

RESPUESTA